La Diputación vuelve a apoyar la Copa de Galgos en Campo Abierto, prestando su nombre a una iniciativa que alcanza su segunda edición, con un desarrollo que se va a extender en los meses de diciembre y enero, según han acordado los clubes galgueros segovianos. En concreto, las fechas para la disputa de las pruebas son el 22 y 28 de diciembre y el 4 de enero, según se ha puesto de manifiesto en una presentación en la que ha intervenido el diputado de Deportes, Óscar Moral, acompañado de varios organizadores de la prueba.

El principal objetivo de esta iniciativa es dar visibilidad a esta modalidad deportiva, “que tiene como escenario, además, el medio rural”, como ha destacado Moral. No en vano, la campiña segoviana es la zona generalizada para esta práctica, que quiere además avanzar en difusión precisamente en los ámbitos urbanos. En paralelo, otro de los fines es asentar una cita de estas características, teniendo en cuenta que, en otras provincias de Castilla y León, como Zamora, Palencia y León, con pruebas similares y notable éxito de participación.

La competición tiene como escenarios previstos los campos deportivos acotados que existen en la provincia segoviana, en puntos como Perorrubio, Domingo García, Campo de Cuéllar y Valseca, aunque depende también de manera directa de las condiciones meteorológicas. Las eliminatorias comenzarán desde la ronda de cuartos de final, con el sistema de carrera a una liebre válida de un tiempo mínimo de 55 segundos, excepto la final, que se disputará al mejor de tres carreras. La competición se regirá por el reglamento oficial de carreras y liebres en campo abierto de la Federación Española de Galgos y, si fuese necesario por las exigencias de los acotados, con la posibilidad de juzgarse con cámara de dron.

Los clubes participantes son Los Trillos, Halcón de Mozoncillo, Colenda, La Rabona de Segovia, Diez Amigos, El Tanganillo, San Isidro y Castillo de la Mota. El presupuesto de la competición alcanza los 7.900 euros, contando con 550 para trofeos, 450 para manteletas, 1.500 que se destinarán a pienso para los participantes, 4.200 para colleras, 300 para veterinario y 900 en cargos técnicos. Una prueba que cuenta con la colaboración de la Fundación Caja Rural de Segovia.